Author: mujerhoy
Este martes, 22 de agosto, se cumplen dos años de la muerte de la madre de Isabel Preysler, Beatriz Arrastia, que falleció a los 98 años de edad. Murió en Puerta de Hierro, en casa de su hija y rodeada de los suyos. Hasta 1992, Betty o Beba que es como la llamaban cariñosamente, había vivido a medio camino entre Madrid y Manila, la capital filipina, donde estaban sus raíces, pero sus condiciones físicas ya no eran las idóneas para someterse a vuelos tan largos, por lo que optaron por la solución más práctica. También pesó mucho en esa decisión la pérdida ese mismo año de su marido y que sus hijas vivían en España desde los años 70, a dónde las había enviado a estudiar.
Enrique Iglesias, cuya ausencia en la boda de su hermana Tamara Falcó con Íñigo Onieva fue muy comentada, sí se desplazó hasta Madrid en aquella ocasión en su avión privado desde Miami para despedir a su abuela. Un velatorio que se celebró en la más estricta intimidad, con la presencia de la pareja de Isabel en aquel entonces, Mario Vargas Llosa, y el padre Ángel, quien subrayó la tristeza de Isabel Preysler y Tamara Falcó, pero también la tranquilidad de saber que Betty Arrastia se había marchado en paz.
Beatriz Arrastia nació en el seno de una familia de terratenientes de origen español que se había establecido en Filipinas y cultivaba arroz y azúcar. Avanzada para su época, se dedicaba a los negocios inmobiliarios, y contrajo matrimonio en la iglesia de Malate con Carlos Preysler, quien en aquel entonces era gerente de las Líneas Aéreas Filipinas y delegado del Banco Español de Crédito en la capital filipina.
Formaban
un matrimonio elegante y de porte aristocrático, al que se rifaban en las celebraciones de la alta sociedad filipina. Durante las cinco décadas que estuvieron juntos, tuvieron seis hijos: Enrique, Victoria, Isabel, Carlos y los mellizos Beatriz y Joaquín. Su marido falleció en 1992, lo que supuso un gran punto de inflexión en su vida.
De su árbol genealógico también ha trascendido que una de sus hermanas es la representante de Filipinas en el Vaticano. A propósito de sus hermanas de padre, habidas fuera del matrimonio, una de ellas fue Miss Filipinas, y la otra, la actriz y bailarina Neile Adams, estuvo casada en primeras nupcias con el legendario Steve McQueen.
Su intervención televisiva en Telecinco generó una enorme expectación
Hasta poco antes de su muerte, Betty no se había prodigado en los medios de comunicación, pero sus nietos Tamara Falcó y Julio Iglesias jr., fruto de los matrimonios de su hija con Carlos Falcó y Julio Iglesias respectivamente, le habían preparado una sorpresa televisiva que le emocionó mucho. Tenemos que echar la vista atrás al 22 de febrero de 2019, fecha en la que, por cierto, pisaba por primera vez un plató para ponerse en las manos de Carlos Sobera, presentador de Volverte a ver.
Estuvo
respaldada por sus nietos y se la veía muy feliz. Tamara, por aquel entonces aún no era el fenómeno mediático de estos días, por lo que afirmaba: «Es la primera vez que estamos juntos en televisión, mi hermano es más dado a esto», afirmaba Tamara. Su hermano de madre corroboraba sus palabras y aprovechaba para ensalzar a la matriarca del clan: «Es una abuela muy especial. Siempre que vengo a España, una de las razones por las que lo paso mejor es por estar con ella en mi casa. Desayuno con ella, almuerzo con ella, le pido consejos. Es maravillosa, una gran persona, con un corazón gigante. Te ríes mucho con ella», manifestaba el cantante, visiblemente emocionado.
Beatriz Arrastia, en el bautizo de su nieta Chábeli Iglesias. / Gtres Una de las cuestiones en las que más se ha significado en los últimos años Tamara Falcó ha sido lo importante que es para ella la fe y en ese programa puso de manifiesto la enorme influencia de Betty Arrastia en este sentido: «Mi abuela iba a misa todos los días. En casa éramos un poco ateos y nos metíamos mucho con ella. Es un ejemplo para mí. Nunca dio su brazo a torcer. Gracias a sus rezos consiguió que yo me convirtiera. Cuando le dije que me quería confesar, mi abuela tardó veinte minutos en encontrar un sacerdote. No iba a perder la oportunidad de salvarme».
Perdió tres hijos prematuramente y lo supo afrontar con enorme estoicismo
En el programa se recordó que Betty había perdido tres hijos y estas circunstancias tan duras las llevó con estoicismo. El primero de ellos fue Enrique, que tenía solo 25 años y falleció a consecuencia de la mala combustión de una estufa en un hotel de Hong Kong. El segundo, Carlos, que había estado cinco años en prisión en Manila y murió a consecuencia de un tumor en el hígado. Y por último, no logró superar un cáncer de pulmón su hija Beatriz, que murió en octubre de 2011.
Su estoicismo lo ha heredado también el hijo de Beatriz, Álvaro Castrillejo, el primo con quien Tamara Falcó mantiene una relación más estrecha. En una entrevista que Mujerhoy mantuvo con él el pasado mes de mayo nos manifestaba que «yo tenía 24 años entonces, ya una edad considerable, pero da igual la edad que tengas, la falta de una madre siempre será la falta de una madre. Se nota su ausencia. Es ley de vida. las cosas pasan y tocan, no puedes estar todo el rato pensando qué pena, pasó y ya está. Es horrible, pero hay que seguir».
Betty Arrastia, junto a Isabel Preysler, Tamara Falcó y Joanna Preysler. / / dr
Betty Arrastia, en el mencionado programa, además de ponderar las cualidades de su hija Isabel, destacó lo buenas personas que son sus nietos: «Son maravillosos. No tengo palabras para expresar el cariño que les tengo, ese cariño tan importante en la vida, que me sale del alma. Son dos chicos que hacen cualquier cosa que quiera, me conocen bien. Enseguida me abrazan o me dicen ‘ya sé lo que quieres, Beba’. De pequeños, el más travieso era Enrique, Julio no lo era tanto, pero ya de mayor es otra cosa. A Tamara hay que admirarla, ha montado un negocio que da gusto. Quiere demostrarse a ella misma que puede hacer lo que ha empezado. Sabe de fashion. Trabaja de verdad bien«.