Author: mujerhoy
La princesa Leonor, que
cumplió 18 años el pasado 31 de octubre, afronta un futuro que no será especialmente fácil. A su intensa formación militar y académica –ya se especula sobre qué carrera universitaria podría estudiar– se le unen
unas condiciones muy particulares dado el importante rol que ocupa.
Como heredera,
la primogénita de los reyes Felipe VI y Letizia también tendrá que
asumir aspectos menos agradables como importantes recortes a su privacidad y restricciones en algunas de sus libertades. Pero también tiene a su favor el ejemplo de su padre el rey, un modelo a seguir que, seguro, le hará más fácil su camino hacia la Corona.
Con respecto a
la infanta Sofía, Jaime Alfonsín también se ha aventurado a considerar que debe seguir los pasos de su hermana excepto en la formación castrense, solo exigible a la heredera al trono. Y ha dejado claro un punto: Sofía tendrá que decidirse entre dedicarse al servicio del Estado o a trabajar en la empresa pública. Pero ambas opciones juntas no serían aceptables.
La princesa Leonor y su magnífico comienzo como heredera al trono
La primogénita de los reyes don Felipe y doña Letizia, que cumplió 18 años el pasado 31 de octubre –el mismo día que
juró la Constitución como heredera al trono–, encara ya una etapa fundamental para su futuro como reina de España. Centrada en su formación militar, como ya hizo su padre Felipe VI, la princesa Leonor está a punto de
concluir su etapa en la Academia General Militar del Ejército de Tierra en Zaragoza. El próximo curso ingresará en la Armada en Marín (Pontevedra), donde permanecerá un año. Y ya en el curso 2025-2026 completará su formación en la Academia del Aire de San Javier, en Murcia.
Como vemos, se trata de una intensa formación que para una chica joven «normal» implicaría un enorme sacrificio. Pero la vida de la hija mayor de los reyes está ya más o menos programada, y tendrá que seguir con la hoja de ruta prevista para ella. Tan solo podría
decidir sobre la carrera universitaria que cursará, pero eso será dentro de un par de años.
La princesa Leonor y la infanta Sofía junto a la reina Letizia. /
gtres
La realidad de la princesa Leonor es que en su vida futura tendrá que enfrentarse con situaciones que para la mayoría de las personas sería un drama, pero que ella aceptará sí o sí. Por el (nada) simple hecho de ser la heredera al trono de España. Así lo ha confirmado días atrás Jaime Alfonsín, quien fue
Jefe de la Casa Real durante una década, además de haber sido la mano derecha de don Felipe en su etapa de príncipe de Asturias y durante casi 20 años.
«Reinar conlleva la restricción de libertades», ha afirmado el experto durante unas jornadas organizadas por la Cátedra de Monarquía Parlamentaria de la Universidad de Burgos, y con motivo del X Aniversario de la
proclamación como rey de Felipe VI. El exjefe de la Casa de Su Majestad el Rey también destacó convencido que la formación académica que la princesa de Asturias será «del más alto nivel».
Además ha reconocido que estos primeros pasos de Leonor en su formación para su futuro como reina «ofrecen una gran confianza e invitan al optimismo». Quien fuera mano derecha de don Felipe durante casi treinta años, y todavía uno de sus consejeros, también cree que esa formación elitista nos será suficiente para ejercer sus funciones como reina de España. «El oficio de reinar no se aprende ni en el colegio ni en la universidad», ha dicho.
La princesa Leonor y su futuro: recorte de libertades y privacidad y conexión feminista
La hija mayor de don Felipe y doña Letizia tiene que estar muy segura de sus deberes como heredera. Según el ex jefe de la Casa Real, debe «creérselo» y «estar a gusto», ya que su vida lleva implícita una «restricción profunda de libertades» y un
reducidísimo margen para la privacidad. Probablemente esta sea una de las partes más complicadas en la vida de la heredera, la de no poder disponer de su privacidad y algunas de sus libertades como cualquier ciudadano anónimo. «La ejemplaridad es imprescindible para el desempeño del servicio público», ha afirmado Alfonsín, incidiendo en que es algo que va mucho más allá de respetar y cumplir las leyes.
Pero si hablamos de ejemplaridad, y como también ha reconocido Alfonsín, Leonor no lo tendría tan difícil con su padre como modelo a seguir. La impecable trayectoria del rey Felipe VI, formado en el ejército pero también con carrera universitaria y líder de una monarquía moderna, servirá sin duda de la mejor guía para que la heredera siga su camino de forma también impecable.
El rey Felipe VI es, al fin y al cabo, también responsable de la educación de su primogénita, más allá incluso de su condición de padre.
La princesa Leonor como hija adoptiva de Zaragoza. /
GTRES
Pero hay otro aspecto importante al que Alfonsín se ha referido y que tiene que ver en cierto modo con
la conciencia feminista que va calando en una sociedad como la española. Y es el que recomienda a la princesa de Asturias a sintonizar «con el sentir, las aspiraciones y el deseo de las jóvenes, de las mujeres» de nuestro país. Si consigue hacerlo, «habrá dado pasos muy importantes en su consolidación personal e institucional», reconoce.
Leonor está unida a su hermana la infanta Sofía, a quien Alfonsín también se ha referido afirmando que debe seguir los
pasos de ejemplaridad de su querida hermana, aunque habrá diferencias en su educación. Sofía no recibirá formación militar, algo reservado para la heredera, y tendrá que «decidirse entre dedicarse al servicio a su país o trabajar en la empresa privada. Pero nunca ambas cosas juntas, ya que, a su juicio, sería «inaceptable». Quien avisa no es traidor.
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